Hay formas y formas de revitalizar un producto, en el caso de Warner Brothers en chiste y en serio se creó a principios de los noventa una revitalizada Serie de dibujitos.
Los Tiny Toon, en palabras del mismísimo Bugs Bunny, llegaron en un momento preciso en que al famoso estudio se le estaba secando las ideas y claro, la apuesta fue ideal al juntar lo clásico de la Warner con reinvenciones ajustadas a la época.
Desde los mismos créditos iniciales y finales, se podía ver la clásica "ruedita de la Warner" que mutó a todos los colores del arcoiris, de la cual veíamos salir a dos conejitos jóvenes (Buster y Babsy) de colores celeste y rosado "foquísimos". El "full color" que exhibían el pato verde (Plucky, mi favorito) o el demonio de Tasmania morado (Dizzy) hacían que los dibujos animados de la vieja casa se vean tan actualizados como las series televisivas en boga tipo "Fresh Prince" (Príncipe del Rap) o "Saved By The Bell" (salvado por la campana), sino, acuérdense también de los créditos de las sitcom anteriormente mencionadas.
Claro, tras la colorida estética y la temática algo más actualizada, venían los elementos típicos de Warner Brothers, tales como personajes antropomorfos (conejos, patos, cerdos, gatos y demás), con personajes "humanos" en el papel de villanos (la insoportable Elmyra y el codicioso Montana Max) y sobretodo, las bromas físicas y los gestos exageradísimos en los personajes, fórmula que al menos apra mí es infalible.
En mi caso, tanto Tiny Toon como las series de TV "early 90's", influyeron en una estética en la cual, cunado era niño prefería vestirme de múltiples colores (quién me conoce ahora no lo creería) y no sólo a mí, sino a muchos niños... y hasta adultos!. A continuación, les dejo con el tema de apertura de Tiny Toon.
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